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AMOR Y CONCIENCIA

     Tienen en común: el instinto.El cual es un elemento inherente al ser humano. Amor y conciencia no surgen como fruto de una investigación sino mas bien de lo mas intimo del ser, de la persona, su instinto. No son pues, racionales ni mesurados ni controlados. La libertad es su bandera.
      El amor es libre, surge en el momento menos esperado y con la persona menos esperada. No conoce la edad, el color, la medida ni el sabor. Simplemente, se ama. De igual la conciencia, la cual se mueve en el interior del ser con luz propia, con ímpetu y firmeza.
      Así como existe un conocimiento pre-científico, o un conocimiento pre-lógico, así también existe una comprension pre-moral del significado, que es la conciencia. Es decir, ningún valor moral en si es tal sin una comprension previa de lo que intenta ser. Mientras la conciencia esta en acción no se sabe su racionalidad, su lógica. Solo se sabe a "posteriori", después del hecho. De igual sucede con el amor, mientas se dice que se ama no se sabes si es un amor autentico, firme, total, definitivo. Solo a "posteriori", al final de la existencia los hechos lo confirmaran.
      Por el hecho de ver parejas, matrimonios que se aman, no significa amor eterno. Las separaciones así lo confirman. Al  menos, no siempre, existe la "intención", la "voluntad", en muchos casos, de llevarlo a mejor termino, a una feliz realización. Es que el amor, en su hermosura y complijidad, es inescrutable. De igual la conciencia, nadie puede conocerla y descifrarla en su totalidad. Lo que se manifiesta a la conciencia es lo que es, pero lo que se "trae" a ella no es algo que es, sino algo que debería ser. De igual en el amor, aunque es lo que es, no siempre se trae lo que es, sino lo que debería ser.
    Que quiero decir con este rollo: hay que actualizar siempre desde nuestra intuición, que surge desde el instinto, el amor y la conciencia. Y no solo eso, hay que orientarlas y despertar todas las pontecialidades que no se han hecho realidades. Esto nos hace seres que no dependemos de la colectividad, pues así como el amor es de índole personal, individual, así también la conciencia. El amor no es fruto de colectividad ni solo de los impulsos, sino fruto de una conciencia que entiende que necesita amar y ser amado. Nos dice con claridad que el amor no busca elegirse a uno mismo sino a ti, al otro.
     En resumen: es convertir en un habito de vida el amor, no como fruto de una reflexion, o como fruto del consciente, sino mas bien del inconsciente. Amo porque nace amar. Algo espontáneo e inocente. Algo tan natural como reír.
   

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