La opción Jesus. Seguir a Jesus. Anunciar a Jesus. Echar mano al arado. Son palabras mayores que implican radicalidad, desprendimiento, valor y mucho amor. Por lo general nuestro seguimiento va condicionado. Va condicionado a un logro, sea material o espiritual. Lo cual es ya un fallo. Jesus nos advierte con una gran verdad: "el Hijo del hombre no tiene donde reclinar la cabeza" (Lc 9, 57-62]. No se sigue a Jesus para obtener un bien personal, sino para estar con El como opción personal. Se nos está indicando que Jesus "no tiene" ni para El ni para otros. Lo único que tiene es su persona. El es el tesoro escondido y que ahora se revela, se manifiesta, se hace opción del ser humano. Escogerlo a El es escoger el mayor tesoro puesto que EL es lo mejor y máximo que posee Dios. Seguir a Jesus no es simplemente un confesarlo con los labios, ni un bautismo...es llevarlo impreso en toda nuestra vida, en todo nuestro ser. No se trata...
RELIGION-FILOSOFIA