Un niño se me acercó al teminar el culto religioso: dígame, ¿qué es el Reino de los cielos? Su mirada inquieta y penetrante hizo temblar mi corazón. ¿Qué decir? ¿Qué responder? Me sentí sorprendido. Sólo logré susurrar: es el hogar donde Dios Padre comparte con sus hijos. Por su sonrisa vi que le gustó mi respuesta. Ya en casa me senté a indagar sobre el Reino de los cielos. Y lo primero que hice fue separar las palabras "Reino" y "cielos". Con frecuencia se emplean como sinónimos. Y en mi modo de ver el concepto "Reino" es pobre, de poca sustancia y hasta denigrante. Es Pobre porque el concepto "persona" viene encasillada a un orden, a un sistema, a una jerarquía. Unos son superiores a otros, unos son más de "élite " que otros", unos "mandan" y otros "obedecen". Es decir: no hay igualdad. Y es denigrante porque la dignidad humana viene pisoteada y deshumanizada. Y no creo...
RELIGION-FILOSOFIA